
Descubriendo nuevos mundos en México
Leyendas en Oaxaca
La encantada
Cuenta la leyenda que en el ejido Guadalupe Victoria, en una poza que se formaba en la parte alta del río San Felipe, los hacendados iban a bañarse y a bañar a sus caballos; las mujeres lavaban la ropa y los niños jugaban y reían. Un día subió a bañarse una joven muy hermosa que encontró una pequeña vasija roja. Le gustó mucho y se metió con ella en el río para bañarse, pero al entrar en el agua, se quedó totalmente paralizada, ahogándose rápidamente. Nadie la volvió a ver y sus padres, desesperados ordenaron una búsqueda por otras partes. Pero no encontraron nada, solo la vasija roja.
Después de algún tiempo, unos hombres subieron para bañar a sus caballos. Encontraron dentro de la poza a una joven hermosa con la vasija. Cuando metieron sus caballos en el agua, vieron que la mujer tenía una cola de pez. Los caballos se quedaron inmóviles y murieron ahogados. Desde entonces, se cuenta que quien va la poza alrededor del mediodía, se encuentra a la mujer con la cola de pez y la vasija roja, y es atraído hacia al agua ahogado sin remedio. El lugar ha caído en desgracia y casi nadie se atreve a subir por allí.

El sombrerudo
El sombrerudo es una figura similar al charro negro o al catrín, figuras a las cuales se les llega a asociar con la aparición del demonio en la provincia mexicana.
La historia ocurrió en una secundaria del estado de Oaxaca, en el cual durante un día común y corriente se encontró a una chica desmayada en la parte posterior de los salones, y al lograr despertarlo ella solo se limitaba a decir que "había visto al sombrerudo trepado en un mangal", desmayándose al ver a tal criatura. El Sombrerudo es, supuestamente, la variante masculina de la Matlazihua y puede confundirse con el charro negro o el catrín, y tiende a aparecérsele a las mujeres a media noche o por pasajes que transitan con el propósito de "asustarse".

La Carroza.
